lunes, 10 de marzo de 2008

Jade

Supe de minutos robados a la cotidiana y destructiva impronta del día. Tiempo acurrucado entre deseos que dolían por nacer, para redimirse suavemente al arrullo de su voz. Te sentí como un mar que reflota la vida de tanta sal... y morí de tristeza cuando el verde en tu mirar llovió su jade del destino.

6 comentarios:

Xi dijo...

No olvidar que el agua con sal tiene vida, ay, que después puede envenenar.

Y quedarse siempre con el sonido de la espuma. Y bucear por el verde hasta naufragar.

Besos transparentes.

silente dijo...

Aunque el naufragio sea inevitable muchas veces, vale la pena navegar.

Besos de bruma salina.

Xi dijo...

¿Todavía buceando?

Se te extraña, nadador.

Besos de espuma

silente dijo...

Estoy más silente que de costumbre. El dilema de arrancar frente a una hoja en blanco se me abrojó y en verdad cuesta horrores despegarlo.
Gracias...prometo alejarme del descuido para seguir escribiendo.

Besos de rocio y nochecita

Li dijo...

Te estoy leyendo de a poquito..

Me gusta mucho. Mucho más de lo que un me gusta mucho puede expresar.

silente dijo...

Li : mejor así, "de a poquito", ojalá ése fuera un tiempo para conjugar siempre.
Sigue leyendo...(prometo no interrumpir) :)